De las cosas más importantes para poder mejorar nuestro calidad de vida es la de tener metas. Cuando carecemos de estas; somos fácilmente influenciables, y terminamos haciendo cosas que no queremos.  Nadie puede avanzar hacia un lugar que no sabe dónde queda; nadie puede conseguir algo si no sabe que es lo que realmente quiere. Es por eso que tener claro que es lo que queremos, por donde llegamos y cuanto nos demoramos, es fundamental.

Tener metas las tiene cualquiera, pero muy pocos lo logran o se demoran mucho debido a que no saben alinear los esfuerzos, y eso es lo que vamos a ver en este artículo.

Cada uno de nosotros tiene cientos de deseos y cosas que quiere conseguir, eso está bien, ya que esto es lo que nos da ánimo para luchar cada día, para mejorar. Desafortunadamente lograrlas requiere mucho esfuerzo mucha voluntad, la cual es algo que no crece en los árboles.

La razón de la falta de voluntad es que estamos llenos de deseos a los cuales nos dirigimos a conseguirlos todos al mismo tiempo, y en la mayoría de los casos no logramos ninguno.  Eso nos llenos de estrés, y terminamos completamente desgastados.  Después de ver que las cosas no nos salen, entonces solemos buscar salidas fáciles, o nos dedicamos a vicios que nos distraigan de ese sentimiento de frustración.

Por algún lado debemos empezar. De entre todas las cosas que queremos, hay algo que realmente es importante, y si conseguimos esa meta nos será más fácil conseguir otras. 

Al tener en la mente una sola cosa, y al tener que hacer una sola cosa, entonces tendremos mucha más fuerza.  Cuando logremos esa meta, se convertirá en una fuerza adicional que nos ayudará a conseguir las demás metas. Las otras cosas deberán ser olvidadas por un tiempo, lo importante es que usted se demuestra así mismo que está avanzando y es capaz.

Hay algo que nos detiene y que hace que no seamos capaces de concentrarnos en algo y empezar a realizarlo, es la ansiedad que nos genera el no poder tener en el instante todo lo queremos. Es por eso que debemos aprender a enfocar nuestra mente.  

Si no ponemos a revisar en nuestra vida todo lo que nos falta, caeríamos en una crisis de depresión de la cual difícilmente nos recuperaríamos. El concentrarnos en todo lo que nos falta; aminora nuestras fuerzas; pero si nos concentramos en todo lo que hemos logrado y tenemos, entonces nos llenaremos de confianza. Tenemos mucho respecto a muchas personas, y nos falta mucho respecto a otros, aceptar esto nos dará tranquilidad, dejaremos de perder tanta energía en quejarnos, y podremos concentrarnos en una meta.

Hay que aceptar que hay cosas que están muy lejos de conseguirlas, que quizás con el tiempo podríamos, pero por ahora no. Esta es una verdad difícil de aceptar, y eso nos llena de depresión, de ansiedad, y no sabemos qué hacer. Debemos aceptarlo, solo podemos conseguir una cosa al tiempo, y a medida que crecemos, a medida que avanzamos, podremos llegar lentamente a lograr una a una todo lo que hemos querido.

La razón por la que fracasamos en algo, es porque no tenemos la capacidad para lograrlo.  Es así de sencillo, y no es porque seamos unos inútiles, porque los demás nos lleven en la mala, o porque es una confabulación del destino. 

Aceptemos que no somos capaces, ser débil no es un pecado, miremos cuan débil es un niño, y aun así tiene todo lo que básicamente necesita. Así que empecemos por lo que es más fácil, y si una meta es muy difícil, entonces dividámosla en pedacitos y hagámosla por partes.  A medida de que logramos cada pequeña meta, nos vamos llenando de confianza y de fuerza, y entonces seremos capaces de enfrentarnos a cosas más grandes.

La única manera de lograr algo es haciéndolo, no hay otra manera, no va a llegar ese golpe de suerte del destino, ni nadie lo va a hacer por usted.  Si usted no hace nada, entonces no sucede nada. La única cosa que tiene el poder para cambiar nuestra vida son los hechos y no las intenciones. Así que entre más pronto aceptemos esto, más pronto podremos empezar a actuar, y a ver resultados.

La mayoría de nosotros a pesar de que no tenemos todo lo que queremos, al menos si tenemos la capacidad de lograrlo, y eso de por sí ya es mucho.  Hay cientos de personas que no tienen ni la salud, ni el talento, ni el apoyo para lograr tener si quiera las mínimas cosas.  Un hombre en tanto tenga salud e inteligencia, puede lograr muchas cosas, lo único que debe hacer en concentrarse en hacerlas.

De nada sirve muchos talentos si no lo sabemos utilizar, es como si tuviéramos mucho dinero y no lo sabemos invertir, a la final terminamos en la ruina.  Lo mismo sucede con nuestros talentos, si no lo sabemos aprovechar, terminaremos siendo consumidos por vicios y fragilidades. Se dice que órgano que no se usa se atrofia, y lo mismo pasa con nuestros potenciales, ya que si estos no se usan, entonces tienden a desaparecer.  Debemos hacer uso de todo lo que tenemos para lograr nuestras metas, con el tiempo se volverán habilidades sumamente fuertes que nos garantizan el éxito en cualquier proyecto.

Si todos nuestros recursos, si todos nuestros talentos, si todo lo que sabemos hacer, están enfocados en el logro de un solo objetivo, entonces mayor será éxito. Muchas veces nuestros talentos los usamos en cosas que no tiene que ver con nuestros verdaderos objetivos, o simplemente no lo usamos.

Aprenda a usar todo lo que ha aprendido a lo largo de su vida, a su favor. Si usted es un convencido del poder de la mente y la visualización, úselo en el logro del objetivo.  Si usted sabe persuadir a los demás úselo también.  Una vez logra esa meta, ya al menos habrá afianzado un talento de lo más importante, el de “terminar lo que empieza”. No ande buscando nuevas herramientas de superación, como una forma de escapar del compromiso, use lo que ya tiene, quizás usted sabe mucho, pero ha aplicado poco. Con una sola cosa de tantas que sabe, que desarrolle y aplique, puede lograr mucho.

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