Las habilidades de comunicación son de las primeras habilidades que debemos desarrollar bien desarrolladas, somos aceptados a nivel social en la medida que sabemos comunicarnos con los demás, y para ello básicamente hay que ser un buen conversador. El objetivo final de la conversación debe ser la seducción, la persuasión, que es la capacidad a través de tus palabras, producir deseos y cambios de pensamiento.

El ser un buen conversador va mucho más allá de hablar cosas, esto es todo un arte que te abre las puertas en cualquier aspecto. En este artículo lo enfocaremos a hacia las relaciones con quien nos gusta dado que es cuando más faltan las palabras. Si quieren complementar el artículo en este tema, también los invito a leer: “Secretos de seducción

Estas claves también pueden ser aplicadas en tu empresa, en tus ventas y en cualquier relación pública, solo es seguir los mismos principios y funcionan de la misma manera.

Empezaremos generando ideas acerca de qué hablar, y luego daremos técnicas avanzadas para ser un buen conversador. Para desarrollar esta habilidad de la mejor manera, recomiendo leer mi artículo anterior acerca del desarrollo de potenciales.

PARTE 1: CUANDO NO SABES QUE DECIR, ¿DE QUE HABLAR?

Muchos cuando tratan de hablar con la otra persona, empiezan hablando de si mismos, y esto inevitablemente lleva a tratar de impresionar a la otra persona, lo cual te mostrará inseguro y además orgulloso. Si quieres tener éxito, no empieces hablando de ti, a menos que te pregunten, la clave es la conversación circunstancial, en base a las cosas que ves.

Detallar, detallar y detallar….

Si eres de los que no sabes de que hablar cuando estas con alguien es porque te falta ser un poco detallista. Es si no mirar a tu alrededor, que hay en el lugar y entonces encontrarás tema.

Imagina que te encuentras en un lugar tomando un buen café con alguien, entonces detalla a tu alrededor, el clima, si el lugar está vacío o lleno, la decoración del lugar, si las sillas son cómodas, si tiene uniforme el mesero, si el café esta bueno, etc. Cada cosa en el lugar puede generar conversación.

Cada cosa siempre se le puede sacar tema si aprendemos a profundizar en sus detalles. Si es respecto al clima, puedes decir que está haciendo frío, que no eres bueno para el frío, que en ese lugar no suele hacer frío, que si donde ella vive hace frío, etc. Si es respecto al lugar, dirás que está muy bien decorado, que las ventanas están muy bonitas, que es muy grande, que cabe mucha gente, que no se encuentra muy bien ubicado, etc… Es decir que solo tienes que ver a tu alrededor y detallar cada cosa que veas.

Si quieres empezar a ser un buen conversador, entonces toma la costumbre de observar cada cosa de cada lugar y detallarla al máximo. El color, el tamaño, si es nuevo, de que esta hecho, etc. De este modo nunca te encontraras sin tema.

Todo tiene una historia, y un futuro.

Las cosas existen por algo y están en un lugar por algo, alguien las puso allí, vinieron de algún lugar. Detrás de cada cosa hay una historia. Si es respecto al lugar donde te estas tomando un buen café, entonces puedes decir que ese lugar tiene su tiempo de estar ahí, que conoces al dueño, que él heredo una fortuna de su abuelo, que antes había un tienda de zapatos, y que compro el sitio por un precio muy elevado, etc. Debes desarrollar la habilidad de ver que hay detrás de cada cosa, si es un café, ¿entonces es un café Colombiano?, si es la lluvia, ¿alguna vez el sitio se ha encontrado inundado?, etc.

Además de la historia, cada cosa tiene un futuro, y es ese futuro el que tú debes visualizar. Si es respecto al lugar; entonces puedes decir que le ves mucho futuro, que seguramente van a abrir muchas otras sedes. Si es respecto al uniforme del mesero, puedes decir que ese color no luce mucho y que seguramente lo van a cambiar, etc.

En este punto también tienes que entrar en los detalles de cada cosa que estas contando la historia. Si es respecto a la decoración puedes decir que hace falta que le coloquen una fuente de agua, ya que en otro lugar que has visitado, también tiene una fuente de agua, y empiezas a detallar la forma de la fuente.

Todo se relaciona con todo. Todos nos relacionamos de alguna manera con lo que nos rodea.

Todo se relaciona con todo, si es el lugar, de alguna manera se relaciona con la ciudad en la que esta, y con los lugares vecinos. El mesero puede relacionarse con el sitio, la decoración puede tener alguna relación con los muebles de otro lugar. Aprendiendo a mirar cómo se relaciona todo con todo, entonces encontrarás mucho tema.

Lo siguiente es mirar cómo te relacionas tú con lo que te rodea. Todos hemos tenido algún tipo de relación con cada objeto de alrededor. Por ejemplo si es el simple hecho de la lluvia, entonces alguna vez te pudiste haber mojado de una manera tal que te enfermaste…, y luego continúas la historia. Si es respecto al lugar, entonces tú también montaste un negocio solo que este era de pizzas…, si son los muebles, le cuentas que tienen unos muebles parecidos en tu casa, que una vez estuviste en un lugar donde no dejaban sentar a nadie en ellos…

La manera de hacer hablar a la otra persona, es mirar cómo se relaciona con lo que la rodea, y será mucho más fácil si tú ya has contado una historia al respecto, si es el clima puedes preguntar si le gusta el frio…, y deja que cuenta su historia.

Por otra parte, los dos podemos relacionarnos de alguna manera con lo que nos rodea. Si es el negocio, entonces alguna vez nuestras familias pudieron haber tenido negocios, si es la comida, los dos debemos de hacer alguna cosa deliciosa, los dos debemos tener alguna comida en común que nos guste, si es el uniforme, a ambos en el colegio nos debieron de obligar a ponernos uniforme…

como_conseguir_novia

PARTE 2: CÓMO HABLAR EMOCIONALMENTE

  1. Convierta todo lo lógico en emocional. Cómo te sientes, como se siente.

“La emoción mata la razón y el instinto mata las dos”  Jürgen Klaric,  Neuromarketing

Cuando tienes un encuentro con una persona, de lo primero que van a hablar no es de cómo están decoradas las paredes, sino de cómo se pasó, si le hizo reír, si es agradable. Los seres humanos tendemos a buscar y a recordar estados emocionales. Son los impactos emocionales más fuertes los que se quedan en la memoria. Sin emoción las cosas son aburridas.

Si está lloviendo, entonces di que odias la lluvia, si es el café di que te encanta el café, si es un negocio, di cuanto te dolió abandonarlo, si es del lugar, di como tuvieron problemas para abrirlo, si es respecto a ella, entonces después de hablar del uniforme del mesero, y de decir que odiabas el uniforme del colegio, pregúntale si a ella le gustaba el suyo… Cada cosa produce algún tipo de emoción, y ese tipo de emoción la puedes sentir tú o la otra persona. Que sientes… rabia, alegría, miedo, inseguridad, reto, orgullo, amor, pasión, lujuria, pereza, tristeza, compasión, etc…

  1. Todo es cuestión de la forma en que lo haces.

Cada cosa que hables, debes de decirlo con seguridad, con actitud, con entusiasmo. Cuando hables, haz de cuenta que lo que estás diciendo es muy importante y que el otro lo quiere escuchar, de otro modo solo reflejaras inseguridad, haz énfasis con la mano respecto a lo que hablas, para darle mayor forma a lo que dices. Cuando escuches hazlo realmente como si te importara, como si quisieras saber más. Mira a los ojos, sonríe y en lo posible toca a la otra persona para entrar en más confianza. En lo posible trata de ser confianzudo, esta es una manera de ir tumbando la barrera de la prevención, e ir llevando la relación hacia otro nivel.

Maneja los contrarios, es decir que no todo puede ser emocionante, porque entonces la conversación se vuelve extraña, exagerada, además de que es un gran esfuerzo hacer esto. Debe haber momentos serios y otros divertidos, unos momentos planos y otros emocionantes. ¿Has visto lo incomodo que es hablar con alguien que todo lo toma en charla?

  1. Haz que la otra persona se expanda emocionalmente.

“Para conseguir el éxito para difundir ideas es ser diferente, si mostramos lo mismo una y otra vez las personas se aburrirán”.  “Lo más arriesgado que puedes hacer hoy es ser prudente. Ser prudente hoy día es estar en los límites”.  Seth Godin, best selling author

Evita que las conversaciones se conviertan en un monologo, a nadie por lo regular le importa los detalles de tu vida, salvo que estos sean súper emocionantes. Los seres humanos vivimos muy centrados en nosotros mismos, así que si haces que las otras personas compartan como se sienten, entonces te convertirás en un buen conversador, además de que aprenderás a conocer a otros.

No conviertas la conversa en un interrogatorio, eso es muy incómodo. Pare evitar esto, debes hacer preguntas que provoquen una conversación larga. No es lo mismo, ¿Te gusta el café?, ya que su respuesta puede ser un simple, no. Otra cosa muy diferente es comentar, ¡Este café está muy amargo, aunque los he probado peores!, ante esto, ella no puede contestar un simple no.

Las cosas que preguntes no pueden ser típicas, es decir, estudias o trabajas, vives con tus padres o vives sola…. Estos temas son aburridos, comunes y todo el mundo lo hace. Debes salir con temas diferentes, atrevidos, polémicos, que generen más emociones… todo depende del grado de confianza que hayas generado y el tipo de personalidad de la persona. Por ejemplo, cómo te gustan los hombres, ya sé que como yo (aquí debes estar en otro nivel o quedarás como un odioso arrogante), tú tienes cara de mala, de maldadosa, etc.  Salta del contexto normal, y serás más fácilmente recordado.

  1. Pon a volar la imaginación.

“El amor romántico es un estado en el que un individuo se vuelve tan sumisamente absorto en su objeto de «fascinación» que se vuelve hipnotizado, perdiendo sus facultades críticas”.  Fascinated

Siempre lleva la conversación hacia otros niveles, salta del lugar de donde estas, y sobre todo has que eso que imagina sea una aventura para los dos. Si centras la conversación al lugar donde están; entonces será difícil llevar la relación a otros niveles. Todo es potencialmente disfrutable y todo puede ser mejor en el futuro. Por ejemplo: “así que naciste en Cali, siempre he querido conocer ese lugar, por ejemplo si yo fuera de turista hacía donde me llevarías”. Otro ejemplo: “Mira la lotería en cuanto esta, yo con todo ese dinero viajaría por el mundo, te invitaría a ti…”

En la medida que la otra persona visualice haciendo cosas emocionantes juntos, en ese medida te deseara. Miremos las series de televisión, nos transportan a otros mundos, sin necesidad de abandonar nuestras sillas, algunas nos hacen llorar, reír, sentir rabia o amor, aun sabiendo que son solo actores. Nuestra mente a nivel de sensaciones no diferencia entre verdad o mentira, ella reacciona siempre de la misma manera. Es esta la razón por la que no necesitas llevar a alguien a una aventura por la amazona para producir esos estados emocionales, ya que solo basta con solo saber cómo poner a volar la imaginación de las personas. Se el mejor presentador de tus historias, cuéntalas de una manera fascinante, y tendrás audiencia en todo momento.

Dentro de tus historias, tienes que ser capaz de producir admiración, deseo, confianza. No produce admiración que en diálogo menciona temas como que te caites mientras ibas a casa, da la impresión de que eres torpe, o menciones temas como que no sabes bailar, da la impresión que eres un tipo sin experiencia. Debes evitar al diálogo negativo, inseguro, y convertirlo en diálogo que genere emociones positivas.

  1. Cómo desarrollar el sentido del humor.

Aprende a seducir

El sentido del humor es quizás una de las habilidades más importantes en la comunicación, ya que a través de este produces estados emocionales positivos al instante y además tiene el poder de distraer de estados tensos, transformando cualquier situación. El hacer reír a alguien siempre es tomado como una muestra de inteligencia, ya que no es nada fácil. El hacer reír es una habilidad que se puede desarrollar como cualquier otra, para ello debe de empezar aprendiendo chistes, y dándole me gusta a sitios de humor en el Facebook, de aquí pueden surgir ideas aprovechables en ciertas situaciones.

La clave básica del humor está en la exageración. Si alguien está bostezando, le puedes decir que casi te traga, si estornuda, le puedes decir: ¡que lluvia!, si llega tarde, le puedes decir que llevas cuatro horas esperando. La exageración es mucho más efectiva si la combinas con situaciones absurdas, por ejemplo: “Esta hamburguesa tiene de todo, solo les falto el aguacate y los frijoles”. Otra forma de reír, es burlándote de la otra persona sin ofenderla. Si por ejemplo están en un restaurante y para comer la sopa toma un tenedor, entonces dile que te enseñe a comer sopa con un tenedor. Lo otro es que si tú te equivocas, el primero en burlarte de ti debes ser tú mismo, esta es una excelente oportunidad para distensionar la conversación. Si eres alguien no le saca humor a nada, con estos pequeños trucos puedes empezar a desarrollar dicha habilidad.

Por supuesto hay muchas formas de hacer reír, y para eso se necesita cierta práctica. De igual manera como lo hicimos al inicio para empezar a hablar de cualquier tema, entonces del mismo modo debes de practicar para hacer reír. Observa tu entorno, mira de que manera puedes ubicar lo que ves en situaciones absurdas. Por ejemplo, si estás en una discoteca y tienes un vaso en la mano, piensa como puedes ubicar ese vaso en situaciones absurdas. En la medida de que lo practiques, el cerebro tendrá más ocurrencias humoristicas.

La dirección de la conversación.

No se puede hablar de todos los temas, tienes que escoger precisamente algo que destaque, que dé para muchas cosas. No es lo mismo hablar de sillas, que hablar de viajes. Así que entre todas las posibilidades debes escoger el tema más emocionante. Si van a un restaurante, de seguro que si ven a un tipo disfrazado de pollo; entonces este tema dará mucho de qué hablar.

Por otra parte la conversación debes dar la impresión de que tienen muchas posibilidades contigo respecto a una vida emocionante y digna de ser vivida. Ubica tus historias en situaciones en las que tú sales adelante, en las que sueles pasar bien, en las que aprendes, en las que solucionas problemas, y esto de manera subconsciente la persona la irá analizando. Sobra decir que debes de saber hacerlo, disimularlo, ya que si no, sonaras arrogante. La mejor manera de llegar al subconsciente a otras personas es enviar mensajes camuflados a través de historias, por tanto la historias distrae la atención mientras que son las palabras las que van a la mente de la otra persona.

Lo otro es que la conversación debe ser llevada entorno a los dos, a la relación que pueden tener, a los sentimientos que se pueden producir, ya que si no haces esto entonces te será muy difícil cambiar el contexto. En cada conversa siempre lleva lo más lejos que puedas la relación de los dos, y esto solo se logra a partir de una confianza que te hayas ganado. Debes ser capaz de decir a la otra persona que te atrae, que hay algo que te gusta de ella; pero eso si, que se vea natural. Lo más importante es que cuando lo digas, no te muestres inseguro y que no hagas sentir incómoda a la otra persona, y es por eso que cuando lo digas, debes de cambiar a otro tema de conversación normal. Por ejemplo; si has ido a una casa donde hay una chimenea, entonces puedes decir, «mira ese fuego, es como el amor que siento por ti, ardiente», y luego le cambias a otro tema: «Sabes, acabo de ver a Natalia en la entrada». La clave es que sea medio en broma, que pareciera que lo dices por decir, pero en el fondo el mensaje es claro.

La mejor manera de comunicar mensajes amorosos y sexuales es a través del doble sentido, es decir cosas que aparentemente no dice nada, pero que analizando de fondo, dice mucho. Por ejemplo si ves a una mujer comiendo un banano, entonces puedes decir: «Tu y tu costumbre de llevarse cosas a la boca», y luego cambias de tema. Por supuesto, esto tienes que hacerlo como un profesional, después de haber practicado mucho, ya que si lo haces mal, la harás sentir incómoda.

El arte de la conversación en otros ámbitos.

Del mismo modo que podemos dirigir una conversación para con alguien que te gusta, del mismo modo lo puedes enfocar en la ventas, en las relaciones públicas, al presentar tus propuestas en el trabajo.  Siempre hay que seguir los mismos principios, convierta todo a algo emocional, ponga a volar la imaginación, póngale algo de humor.  De la publicidad sabemos que compramos estados emocionales, en las ventas sabemos que compramos básicamente si alguien nos agrada, y no por el producto en sí mismo.  A la hora de presentar una propuesta vale más la credibilidad que tenemos que la misma propuesta.  De este modo las relaciones con las personas, son en función de los estados emocionales que generemos.

Parece muy sencillo, y por eso no le ponemos cuidado.  Es a partir de producir estados emocionales con las palabras que decimos, en poner a volar la imaginación con nuestras historias y en hacer reír, en donde está la clave de un buen conversador

Esto es solo el principio, no desarrollas habilidades de comunicación leyendo un artículo, además de que si no estás acostumbrado, puedes hablar de temas que te hacen ver raro. Todo se mejora con la práctica, es por eso que yo te voy a guiar en una serie de ejercicios que te ayudan a desarrollar habilidades de comunicación, y si quieres superar este punto, entonces te invito a comprar este servicio en el siguiente enlace.

Si te gusto el artículo comparte, y si quieres recordar estos trucos, entonces agrega a favoritos, seguro que te servirá antes de una cita.