Hace muchos años salió un libro llamado “el poder de la mente subconsciente”, en donde nos hablaban de como programar nuestra mente para atraer prosperidad y salud.  Su técnica consistía, en una especie de convicción (fe),  en la que una idea se fija en la mente y el subconsciente trabajaría en ella hasta plasmarla.  Esto es uno de los tantos temas que aparecieron relacionados con el poder de la mente, como también lo fue “el poder psicotronico de la mente”, “el secreto”, etc.  Si bien el programar nuestra mente ejerce enorme poder para atraer circunstancias positivas, esto es poco efectivo si no se hace un trabajo psicológico en nuestra mente. Finalmente La clave en todo esto está en el pensamiento en sí mismo, y de cómo usarlo para transformar conductas y circunstancias es lo que vamos a ver hoy.

Porque los temas acerca del poder de la mente no suelen ser efectivos.

Hoy en día hay mucho convencimiento acerca de estos temas, lo que más escucha uno es alguien hablar acerca del poder de la mente y de cómo con ella se puede atraer riquezas, prosperidad, etc. Sin embargo este convencimiento pocas veces se ve realizado en la propia vida.  La razón de esto es que es muy difícil que un pensamiento habituado a las decepciones, al pesimismo, etc, de un momento a otro cambie dicha corriente de pensamiento, ya que para eso primeramente necesita transformar las raíces mismas de sus decepciones y pesimismo a través de un trabajo psicológico y de autoconocimiento.  Es difícil que alguien inseguro se vuelva seguro con programar la mente, si antes no descubre las raíces de su inseguridad, y empieza a realizar acciones que gradualmente le den confianza en sí mismo.

Lo otro es para que un pensamiento se fije en la mente y de alguna manera pueda hacerse realidad, requiere de un esfuerzo de voluntad en la que diariamente y por varios meses dediquemos a programar la mente, cosa que nadie suele hacer dado que el ritmo agitado de vida nos consume todo el tiempo. Además la incertidumbre de dedicar un espacio del tiempo a hacer algo que no le consta realmente si es verdad, es algo que pocos hacen.  Total que a la larga, el acercamiento a estos temas en la mayoría de los casos no pasa del entusiasmo.

No olvidemos que la naturaleza no hace saltos, y se suele utilizar esto del poder de la mente como una forma de evadir procesos naturales de esfuerzo o de transformación de la propia psiquis, y como dicho salto no se puede hacer fácilmente, entonces finalmente estos temas no suelen ser realmente efectivos.

El pensamiento habitual formado por años.

A través de muchos años nos hemos acostumbrado a pensar de una manera, es algo que ya está grabado en el subconsciente. En la mayoría de los casos es esa forma de pensar la que está perjudicando algunos aspectos fundamentales de la vida. Para cambiar de forma de pensar habría que hacer un enorme esfuerzo para identificar creencias erróneas y transformar conductas muy marcadas en la personalidad. A través de los años hemos cultivado una forma de pensar, y no podemos esperar que con tan solo leer unos libros positivos eso tenga el poder de cambiar nuestra psiquis y nuestra vida. Sin embargo todo eso ayuda.

La mejor manera de contribuir a este proceso de transformación de nuestra mente es través del pensamiento consciente, ya que con el iremos insertando y habituando pensamientos más adecuados sobre una mente preparada para recibirlos.

La transformación de la psiquis.

Entendamos primero que los mecanismos del cerebro generan ciertas reacciones con el fin mismo de protegernos.  Esto son procesos que se han desarrollado por ciertos de años.  De este modo cosas como el miedo, la inseguridad, la incertidumbre, no son más que mecanismos del cerebro para adaptarse a ciertas circunstancias. El miedo por ejemplo puede ser un mecanismo en la que el cerebro advierte de que se debe ser cauteloso ante algo potencialmente perjudicial. Si le empezamos a insertar órdenes al pensamiento de que no tiene miedo, entonces a raíz de no vivir un proceso de transformación de miedo, entonces puede hacer que imprudentemente se lance a situaciones arriesgadas.

Es mejor hacer todo en orden sin apresurarse, y primero es transformar nuestra mente.  Esto es algo de lo que hablamos bastante en este blog, y es quizás por eso el poco interés de mi parte de dedicarme a temas como el poder de la mente a un conociendo de verdad su real eficacia, y cuáles son los métodos para hacer uso de esto.

Cuando la mente esta transformada; entonces será un terreno abonado para que al sembrar semillas de pensamientos positivos estos crezcan más fácilmente.

El poder del pensamiento consciente.

El cerebro es el encargado de gobernar todas nuestras acciones, y es solo a través de nuevas vivencias y conocimientos como él puede transformas la forma de pensar.  Pero dado que llevamos muchos años con un tipo de pensamiento, entonces dicho proceso de transformación es demasiado lento. Es por eso que se debe hacer uso del pensamiento consciente.

Cada pensamiento tiene un enorme poder en nuestra personalidad, y también sobre el entorno. Por ello debemos aprender a cultivar ciertos tipos de pensamientos de tal manera que con el tiempo se conviertan en nuestra forma de pensar.  Luego de identificar el origen de muchos pensamientos destructivos, debemos insertar los nuevos a través de un dialogo mental consciente. Por ejemplo: “voy a sacar adelante este proyecto, confió en que va a hacer así”, si esto lo dice alguien que ha trabajado en la seguridad en sí mismo, es más probable que le dé más resultados, que a alguien lleno de inseguridades. Por otra parte, si empieza a decirse esto cada vez que la duda aparece, entonces con el tiempo será más fuerte ese pensamiento positivo.

Veamos entonces cual es esa forma de pensar que nos puede llevar a obtener grandes logros.  No debemos olvidar que esto es efectivo a partir de una psiquis organizada.

  1. Cultivar la calidad de los pensamientos.

Como una persona piensa, así es, así habla, así actúa y así es su vida.   Es decir que una mente repleta de pensamientos de calidad, es una vida de calidad. Debemos tener en cuenta que cada pensamiento tiene un enorme poder en nuestra vida.  Así que a mayor pensamiento consciente, de calidad y enfocado; mejor será nuestra vida. Una mente que se acostumbra a pensar de que es capaz, de que que cada día hace las cosas mejor, de que todo va a salir bien, de que se merece cosas buenas, empieza a actuar como tal y empieza a atraer cosas similares.

Debemos identificar la calidad de nuestros pensamientos.  Cada pensamiento cuenta y si uno de ellos esta asociado a cosas como el evadir compromisos, el auto compadecerse, el echarle la culpa a los demás, el decirse a si mismo que es un flojo, etc; entonces debemos cambiarlo por un pensamiento de calidad y decirse: “este compromiso soy capaz de llevarlo a cabo”, “tengo suficientes fuerzas para hacerlo”.  Por supuesto, para que esto te lo creas, debe estar a la par con un buen trabajo psicológico y mucha consciencia.

  1. Fijar pensamientos por repetición.

Debemos aprender a repetirnos ciertos tipos de pensamientos de tal manera que estos vayan desplazando a las antiguas formas erradas de pensar, y se conviertan en la forma habitual de pensar.  Pero eso si, esto debe de estar acompañado de una consciencia del porque se hace.

Todo en la vida funciona por repetición, no basta que lo haga una vez, debe hacerlo una y otra vez hasta que esto quede anclado en el subconsciente. Ya que este solo asume las cosas cuando ya se han repetido tantas veces, que no requiere la participación de la consciencia.

  1. Pensar en grande.

La medida de los pensamientos, es la medida de los logros.  Si involucramos nuestro pensamiento con cosas pequeñas, del mismo modo serán las cosas que consigamos. El conformismo es una enorme ancla que no permite que despeguemos. Debemos de aprender a decirnos que merecemos cosas mejores, que vamos a estar mejor, etc.  De este modo nuestros actos serán enfocados en ese sentido, y también atraerá situaciones relacionadas.

  1. No limitar la imaginación cuando no tienes opciones.

Si bien es cierto que hay límites naturales que no se pueden atravesar, y que a veces nuestras fuerzas no son suficientes para ciertas cosas, no debemos nosotros mismos desde nuestra imaginación limitarnos.  Que el obstáculo en sí, sea la limitación; pero que no surja desde nosotros mismos.  La imaginación no tiene límites y si ante algo que no tiene salida, imagina que habrá una salida en algún lado, entonces pueden surgir fuerzas en ti, y también puedes atraer soluciones, que normalmente no sucederían si te negaras a pensarlo.

Cree en ti, y surgirán fuerzas y talentos que no solemos caer en cuenta, cree en las oportunidades y atraerás situaciones casuales y favorables que normalmente no se esperan.

CONCLUSIÓN

El poder del pensamiento es algo real, pero su efectividad será en la medida de nuestra salud mental y emocional.  Si recurrimos a esta como una forma de evadir procesos en nuestra vida, entonces esto puede generar algunas consecuencias en la personalidad, sobre todo respecto a la toma de consciencia, que finalmente influye en la salud mental.

El acostumbrarnos a tener pensamientos de calidad, a fijar ciertas conductas en nuestra mente, el pensar en grande y el  usar la imaginación a nuestro favor, son los medios por el cual el pensamiento atrae y ejecuta las cosas que queremos para nuestra vida.

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Foto by AlicePopkorn