Uno de los sentimientos más difíciles de superar es la pérdida de un ser querido, sea un hijo, una madre, un padre, la pareja. Estamos hablando de instintos muy arraigados en nuestra naturaleza, y por tanto es un duelo muy natural, sin embargo, llega el momento de avanzar, y por eso vamos a dar las siguientes claves.

  1. Tenga un duelo natural

Los sentimientos de dolor y de rabia son mecanismos naturales que cumplen una función y por tanto deben ser expresados de manera natural. De la misma manera que el cuerpo al recibir un impacto siente y expresa dolor, entonces así mismo los impactos emocionales deben ser expresados. En dichos momentos no se quieren escuchar razones lógicas, el sentimiento de impotencia emerge, y por tanto las acciones son de rabia y de tristeza. Es un derecho natural expresar el dolor y cada cual se toma su tiempo y sus formas de expresarlo. Es algo muy particular.

  1. Sobre la recreación de ideas negativas y dolorosas

Si bien es natural tener sentimientos negativos y recrear el dolor, llega un momento que esto lleva a un abismo de negatividad del que no es fácil salir. La mente tiene por función generar nuevas asociaciones de pensamientos, esto permite ver las cosas de nuevas formas. Con la asociación mental negativa, la mente imagina nuevas escenas de dolor, mira todos los ángulos posibles en que las cosas pudieron ser mejor y de porque salieron mal, entonces van surgiendo nuevas escenas de dolor, y finalmente la mente queda atrapada en un conjunto de pensamientos negativos del cual no es fácil salir.

Los niveles de asociaciones a los que puede llegar la mente son casi infinitos, y el imaginar nuevas escenas de dolor, de porque salieron las cosas mal, que se hizo mal, de quien fue la culpa, porque las cosas suceden así y no de otro modo, pueden ser innumerables. La mente empieza a hacer un recorrido por todo lo que conoce y lo empieza a asociar con algo negativo, desde la religión, la propia existencia, y así sucesivamente.

Hay que detener esas asociaciones, es enredarse más de la cuenta, todo tiene un límite, y no debería separar espacios para hacer esta actividad una y otra vez.

  1. Después de un tiempo, evite la soledad

El pensamiento es algo difícil de gobernar, en nuestra mente las ideas vienen y van, sin ningún control. Un pensamiento desocupado lo primero que hace es recrear la emoción mas fuerte.

En el día debería haber total dedicación al trabajo y en la noche total dedicación al deporte. El deporte tiene la ventaja que mueve nuestra sangre de un lado para otro, evitando que esta se concentre en una sola posición. Así mismo favorece la respiración que nos facilita aplacar los pensamientos.

Si bien en un inicio usted puede sentir la necesidad de estar solo, ya pasado un tiempo deberá buscar calor humano. Es en la compañía de las nuevas personas que usted puede avanzar hacia otros estados. El cerebro siente una necesidad natural de establecer nuevas conexiones, cuando no se le da esa oportunidad, entonces se suele anclar en un solo estado, y le es difícil salir de ahí.

  1. Únete a grupos donde más personas compartan su experiencia

Muchas veces nos encerramos en nuestro propio dolor, y ese aislamiento hace ver la situación de una manera mucho más grave. El tener la oportunidad de compartir con otras personas que están pasando por lo mismo, que lo hayan superado, permite que se aflojen ciertos sentimientos, y dicha situación la vea como algo más llevadero. Sino sabe donde encontrar un grupo, busque en Facebook, sino lo encuentra, entonces cree uno. Compartir su experiencia con personas que le comprenden de forma más directa, le puede ayudar a liberar algo de carga emocional, el escuchar la experiencia de otros, le evitará la sensación de que es el único al que le suceden cosas.

  1. Libros de superación personal y de superación de un duelo

Del mismo modo que un constructor no puede armar un edificio con sus propias manos, sin materiales, sin adobes, sin cemento, así mismo no se puede construir un nuevo estado emocional con las propias ideas, sin nuevas formas de ver las cosas, sin nuevas ideas, solamente con el propio estado de desamparo en el que se encuentra.

La vida de cada cual es un cúmulo de experiencias individuales que pueden de cierta manera aportar a los demás. No hay manera que un ser humano dentro de sí acumule todos los saberes y todas las conclusiones acertadas, solamente a partir de sus propias vivencias y sus propias reflexiones. La experiencia de vida particular siempre es limitada, y puede haber otros tipos de experiencias con las que no se han tenido contacto y que pueden aportar conocimientos.

La mente es aquello de lo que se alimenta. Del mismo modo que un hombre que se dedica a consumir exclusivamente grasa, azucares y salsas, afecta su salud, así mismo el hombre que solo alimenta su mente de ideas negativas. Del mismo modo que el cuerpo necesita vitaminas para suplir una falta de algo, así mismo la mente que sufre de motivación, debe nutrirse de nuevos conocimientos para superar un estado. Dicha persona deberá seguir una dieta, y diariamente consumir una porción de libros que le ayude a construir una nueva realidad y forma de ver las cosas.

  1. Abra su mente a nuevas ideas sobre superar la pérdida

Todos los seres humanos en general poseemos las mismas conexiones neuronales, capacidades de superación, niveles de autoengaño. Bajo este precepto, no existe un ser humano que tenga la absoluta verdad y todos los demás estén equivocados, ni tampoco existe alguien del que no se pueda aprender. Toda la experiencia de vida individual siempre aportará a los demás. Por ejemplo, usted no construyó con sus propias manos la casa en que vive, tampoco sacó de la tierra el alimento que lleva a su boca. Independiente de la forma de vivir o incluso de pensar de otros, siempre hay algo que nos puede servir de los demás.

Nuestra mente es un cúmulo de paradigmas aprendidos de la cultura. La cultura latina somos como pensamos y las costumbre que tenemos, porque nuestros padres son así y nos lo enseñaron, porque la sociedad piensa así y se comporta de ese modo. Si naciéramos en otra cultura como la china, entonces seríamos diferentes. Las costumbres de los pueblos fueron formadas por los intereses de los imperios de turno. Nuestras costumbres latinas vienen de la imposición a sangre fuego del imperio español, y estos a sus ves, sus costumbres fueron impuestas a sangre y fuego por el imperio romano.  Es como decir que una cosa es buena porque te la obligaron a comer. Puede haber realidades más allá de eso que nos enseñaron y debemos darles la oportunidad de que se descubran a nuestros ojos.

No debemos ser esclavos del conocimiento, el conocimiento es una herramienta que debemos usar, y no al contrario. Del mismo modo que quien va a construir un edificio, poco puede hacer si solamente tiene adobes y cemento, así mismo un hombre con poco bagaje cultural, con pocas experiencias, con un conocimiento limitado, no podrá construir algo grande.

Las culturas orientales, incluso los pueblos indígenas latinos, tienen otras formas de ver el duelo, es importante que se acerque a esos tipos de conocimiento sin prejuicios, para que de este modo amplíe su mente, sus argumentos, otras formas de ver la vida. Del mismo modo que cuando usted va a una tienda a comprar una Tablet, y luego llega un vendedor, el cual le da la oportunidad de escuchar sus argumentos y este finalmente le convence de comprar un computador. Así mismo cada filosofía de vida, tiene sus argumentos los cuales al escuchar pueden convencernos de ellos.

A veces necesitamos escuchar conceptos que nos ayuden a superar ciertos estados. El conocimiento es algo que debe ser utilizado a favor, y a veces es importante creer en ciertas cosas por se necesita de ellas. Conceptos como reencarnación, vida después de la muerte, puede sonar muy abstractos, pero al igual que al vendedor de la tienda, se le debe dar la oportunidad de ser escuchados, porque son conceptos que pueden ser útiles.

A mayor cantidad de ideas que vean las cosas desde un nuevo ángulo, su mente tendrá más oportunidad de generar nuevo tipo de asociaciones mentales que superen a la asociación mental negativa.

  1. Practique ejercicios de respiración y relajación

Cuenta la leyenda que buda fue un príncipe que toda su vida vivió en la opulencia apartado de los dolores de su pueblo, debido a que su padre siempre lo mantenía en el castillo para evitarle preocupaciones. Un día al entrar en contacto con su pueblo por una festividad, y ya siendo muy adulto, pudo descubrir por primera vez la enfermedad, el dolor, el desamparo; dichos eventos lo conmocionaron profundamente, que ya no se podía quitar la inquietud de su mente de porque existía el sufrimiento. Por eso dedicó su vida a buscar la respuesta a esa pregunta.

Su respuesta llegó a través de una doctrina conocida como budismo, que se explica a través de las “4 nobles verdades”, y el libro «Dhammapada». Buda decía que todos los estados tienen su origen en la mente, y es a través del dominio de la mente, que se puede superar muchas cosas. Para el dominio de la mente solo se puede lograr a través de la meditación. La meditación puede dar esa paz mental que muchos buscan. No es necesario entrar a estados profundos de meditación, sino mínimamente aprender a relajar la mente.

  1. Acepte la realidad

Existen realidades muy duras, problemas de salud, extrema pobreza, perder años de esfuerzo en un segundo, y, sobre todo, la pérdida de un ser amado. La vida es un cumulo de momentos dolorosos y momentos de gozo. Estos momentos forman parte de vivir, y a pesar de todo hay que aceptarlos. No existe una situación que al ser vivida no traiga consigo unos riesgos, unas pérdidas.

Al entrar a una relación se corre el riesgo que la persona que amas se enamore de otra persona y se valla y te deje, si ingresas a un trabajo, también hay riesgo que asciendan a aquel que no hace nada, si compra un carro, hay riesgo de que se lo roben. La vida es cúmulo de situaciones al azar que no podemos controlar, es tarea arriesgada tratar de controlar la vida, no sería fácil, lo que sí podemos controlar es cómo nos sentimos y qué podemos hacer para cambiar la situación.

El tratar de pelear contra la vida, no lleva a ninguna parte, es como tratar de pelear contra un huracán, al huracán no le importa, y tu puedes salir perjudicado. Tampoco se avanza mucho con el tratar de entender la vida, que, si bien es importante, tampoco es tarea fácil. Durante miles de años de evolución de la especie, millones de personas a lo largo de los tiempos, han tratado de encontrar explicación al sentido de la vida, y no ha habido alguien que de una respuesta que deje satisfechos a todos, entonces mucho menos uno, en un par de reflexiones. No se entiende a uno mismo a lo largo de la vida, ahora para entender la vida en un par de reflexiones. Simplemente hay cosas que uno no entiende, porque no tiene el suficiente conocimiento o porque no ha indagado en el lugar correcto.

La vida simplemente se trata de vivir. Del mismo modo cuando se está en una relación se acepta a la persona con sus virtudes y defectos si quiere llevar una relación a largo plazo, así mismo con la vida, la acepta con todas sus variaciones y desde lo que entienda. Lo importante es sacarle el mejor provecho.

  1. Aprender y crecer

Pensemos en un niño de escuela, esa niñez, es un estado por el cual todo ser humano tiene que pasar, dentro de su estudio, el niño enfrenta una serie de problemas que debe de resolver para pasar al siguiente curso, muchos de ellos tratan de buscar solución, otros lo intentan y no lo logran y deben seguir atrapados en ese ciclo.

La vida es un aprendizaje, en el que uno simplemente no avanza porque no ha aprendido ciertas materias, en la medida que uno supera algo, se le abren unas nuevas expectativas de vida. Del mismo modo que un niño no puede siquiera imaginar lo verá en la universidad, así mismo nosotros siquiera imaginamos todas las posibilidades que hay después de que superamos algo.

La vida tiene sus golpes, y solo queda una opción, crecer, avanzar. Hay que salir más fuerte, más humano, mas consciente. Tomar todo ese dolor, para así aprender a valorar las personas que están a nuestro lado, todo lo que podemos hacer por ellos en vida. Desafortunadamente los seres humanos a veces solo valoramos ciertas cosas, cuando sufrimos golpes con la realidad. A veces las personas somos arrogantes, egoístas, desconsideradas, y solo los choques con la realidad, nos vuelve un poco más humanos, más atentos, más humildes.

  1. Valorar y dar amor a quienes tenemos a nuestro lado

No existe un estado en el que te puedes quedar sumido en la desesperación, y no pasar nada. Si el daño no se hace a sí mismo, se le hace a los demás. Existen familiares que están preocupados, habrá personas a las que se van a descuidar, y la superación debe ser por ellos, por ese padre, madre, hijo, hija, hermano, hermana, esposo, esposa, que aún siguen a nuestro lado, y que requieren de nosotros la mayor atención.

Esa madre sufre por su hijo al ver el estado de desesperación y que no puede hacer nada por ayudarle, esa esposa sufre por su esposo al ver que no le puede ayudar a salir de la situación de desespero, ese hijo sufre por su padre por ver que todavía sigue en la misma situación. Ese estado genera una atmósfera de tristeza que llega a todos los rincones de la familia y por tanto es deber de que, si un ser querido te ha abandonado, debes de superar y hacer felices a quienes permanecen a tu lado.

  1. Honrar la memoria superándonos

El mismo amor que sentimos por un ser querido, es el mismo que sienten por nosotros. Si ese ser amado nos viera en tal situación, sumidos en el dolor, en la autodestrucción, seguro que estuviere donde estuviere sentiría más pena que gozo. Ese ser seguro nos querría ver alegres, más fuertes, en mejores condiciones, porque nos ama, y quiere lo mejor para nosotros.

El conocido físico Einstein, decía que la energía no se crea ni se destruye, solo se transforma. Por ese mismo medio, el alma no desaparece en un instante, sino que entra a unos nuevos estados desconocidos, en los que sigue sus debidos procesos espirituales. Muchos afirman que dichas almas a veces no avanzan, porque siguen atadas debido al dolor de sus seres queridos, a lo cual no puede ser simplemente indiferente. De esto ser así, debemos aprender a superar y saber que todos estamos de paso.

Todos estamos de paso, la madre no tendrá siempre a su hijo, el hermano no siempre estará con la hermana, el hijo no siempre tendrá a su padre. Nuestra función para con ellos es darle lo mejor de nosotros en cada instante y cuando tenemos la oportunidad, una vez estos seres se apartan de nuestro lado, debemos dejar que sigan su camino, sus procesos, su vida. No solo se trata de nosotros, también se trata de la otra persona. La mejor manera de honrar su memoria es ser todo aquello que esa persona querría para nosotros, es decir, vernos de la mejor manera. No solo es una persona, sino también todos los seres queridos que nos rodean.

  1. La importancia de ser feliz por nosotros mismos

La oportunidad de vivir es un don muy grande, y debemos de hacer con ello algo que nos construya a nosotros, que aporte a los seres queridos, y que ayuda a todos en la medida que podamos. Llegará el momento, cuando ya no tengamos fuerzas y miremos hacia atrás para observar todo lo que hemos hecho, todo lo logrado. Puede que llegue el momento que comprendamos que no somos nosotros, sino que somos todos, en la medida de lo posible, debemos dar todo nuestro talento por aportar al entorno, a la sociedad, las personas. Pero antes de llegar a ese estado, debemos avernos superado a nosotros mismos.

Nadie puede dar de lo que no tiene, no podemos dar tranquilidad a otros, si estamos atormentados, no podemos dar bienestar si estamos arruinados. Lleguemos a un estado superior, para desde allí hacer mucho por los demás.

Si nos anclamos al dolor y al tormento, podemos hacer que un estado por el cual todo ser humano a traviesa en algún momento, se convierta en una situación que nos amarga la experiencia de vida, y bueno, después de todos nacimos para ser felices, y esa felicidad la debemos de buscar, y esa búsqueda requiere un esfuerzo de nuestra parte. No querrá usted cuando llegue a la avanzada edad, unos 80 años, mirar todo lo que dejó de hacer, por no haber superado una experiencia dolorosa. Todos los proyectos que tenía en su mente, toda la familia que tenía, todas las oportunidades de hacer feliz a alguien, todo lo que pudo lograr, son cosas que usted no querrá pensar cuando llegue a avanzada edad.

  1. Transmutar el dolor

La mejor manera de transformar un dolor es a través de los actos, porque muchas veces el dolor no se supera, debido a que hay razones, actos pendientes en el subconscientes que reclaman algo, reclaman haber hecho algo, reclaman recibir algo. La mejor manera de llegar a esos actos es a través de otra persona.

Siempre puede usted transformar ese dolor asistiendo a orfanatos, centros para adultos mayores, y en general cualquier lugar donde usted puede encontrar personas a quienes les pueda dar todo ese amor que no pudo dar, decir todas esas palabras que no pudo decir, escuchar algunas palabras que no alcanzo a escuchar. Solo a través de este tipo de realidades la mente puede transformar mejor esas confusiones mentales y superarlo. Si usted todavía tiene mucho amor para dar, entonces hay personas que necesitan de ese amor. Llegará el momento que su cuerpo compense lo que debe compensar y reciba lo que debe recibir.

  1. Haz un propósito y un plan

El problema de cualquier estado de superación es que simplemente se queda en la mente. Cualquier acontecimiento de la vida para llevar al éxito, debe tener una inversión de tiempo, de esfuerzo. Muchas veces queremos superar algo sin poner un esfuerzo de nuestra parte, y poco avance habrá con tal actitud.

El problema con la mente es que se le olvidan las cosas, y por ello se puede tener en mente un propósito y luego con cualquier actividad se le olvida, para luego en algún momento volverse a dejar llevar por ciertos sentimientos negativos. La mente olvida las cosas, que es allí donde se mueven los propósitos, pero las emociones no se olvidan, que es generalmente donde están las emociones negativas. La mejor manera de acordarse es empezar ahora, y fijarte para mañana un horario en el que lo puedas seguir haciendo. Toma algunas de estas claves y programa cuando la vas a aplicar. Toma nota en el celular, y crea un recordatorio. De esta manera te sentirás forzado a actuar. Repite en tu mente, cual es tu propósito, para que no lo olvides.

Cómo encontrar la paz mental tanto si eres creyente o no creyente

Si eres creyente la fe te salvará, una constante oración puede atraer a tu vida bienestar. Hace algunos años conocí a una mujer que tenía una hija, esa mujer cuando estaba en embarazo le dio una enfermedad que repercutió en el feto, y por eso le aconsejaron que abortara, ya que, si nacía, la bebé sería ciega y deforme. Ella decidió continuar, y efectivamente el bebé nació así. Ella era una mujer creyente, y todas las noches en oración, por muchas veces le rogaba a Dios que le diera la vista a su hija. Pasado un tiempo, la niña empezó a ver, y los médicos lo clasificaron como milagro, decían que era físicamente imposible. La fe funciona para aquellos que realmente creen y son constantes en su fe. A través de la fe una persona puede encontrar redención.

Por otra parte, existen personas de poca fe, sea cual sea la razón, esta persona deberá aprender a encontrar soluciones a través de sus propios medios. Nada es gratis, así como el hombre de fe deberá orar por meses para obtener el favor de la divinidad, así mismo el hombre de poca fe deberá trabajar por meses para lograr unos resultados que solo se logran a través de unos actos. Esos actos se refieren a la aplicación de algunas de las claves que hemos dado en este artículo.