El cerebro humano es quizás el mayor logro de la evolución, ya que solo a partir de sus procesos se ha construido el mundo tal y como lo conocemos.  De todas maneras eso no quiere decir que sea perfecto y omnipotente, y quizás son muchas las falencias que pueda tener a la hora de realizar ciertos procesos.  Uno de esos procesos en los que más falencias se presentan es el de la comunicación.

Somos seres sociales, nuestra vida está basada en las relaciones con los demás, y por tanto estamos en continua comunicación con ellos.  Estamos de acuerdo de que la mayoría de los conflictos que se presentan en las relaciones interpersonales están relacionados con problemas de comunicación. Esa ofensa que nos hicieron, ese desacuerdo, esa injusticia, ese chisme, etc, muchas veces son producto de dichos procesos del cerebro más que de la voluntad de la persona.  Veamos algunos.

  1. El cerebro reptil y las personalidades.

La teoría del cerebro trino, fue desarrollada por el neurocientífico Paul D. MacLean el cual propone que el cerebro en realidad es tres en uno. El cerebro Reptil (Tallo cerebral) y los instintos de supervivencia, el paleomamífero (Sistema límbico) y las emocional, y el neomamífero (neocorteza) y los procesos lógicos.  El hecho es que la lógica se ha desarrollado hace muy poco, por eso esa parte del cerebro corresponde a la corteza cerebral y también a procesos más conscientes.  El cerebro reptil está en la propia raíz del cerebro, y son procesos más subconscientes, más impulsivos, y sobre los que se tienen menos control.

Esa es la razón por la que somos más reactivos que lógicos.  Usted puede lógicamente pensar que no debe continuar con un determinado vicio y a la larga le vence más el impulso. Usted sabe lógicamente que debería cerrar la boca en ciertos asuntos; pero puede haber un momento en que no es capaz de controlarse y dice lo que no debe ser dicho.  Esta impulsividad también influye mucho en nuestras decisiones, ya que lo que decidimos es algo más emotivo que consciente. Hablando ya en términos de la comunicación, es esa parte más básica del cerebro la que gobierna muchos procesos de comunicación.

Las creencias religiosas y políticas, las aficiones deportivas y musicales, están relacionadas con las partes más básicas del cerebro, y por tanto no están muy sometidas a la lógica, ya que dichos comportamientos se relacionan mucho con los instintos de supervivencia y con aspectos emocionales muy profundos.  Es quizás esa la razón por lo que alguien es capaz de matar y morir con tanto gusto por una idea política y religiosa, es por eso las guerras entre hinchas de futbol, y también algunos conflictos en los conciertos.  Si quiere haga un ejercicio en internet, visite alguna página con un foro que promueva alguna idea (películas, equipo de futbol, etc), y usted ubíquese como detractor, y verá como el clima cordial rápidamente pasa hacia un clima de insultos. En mi propia experiencia en la que he intercambiado ideas con personas de pensamiento muy cerrado, he visto cómo pueden pasar meses antes de que el cerebro pueda dejar de pensar en cómo defender las propias ideas. Es por eso que muchos procesos de paz y acuerdos entre posiciones políticas, pueden permanecer irreconciliables por mucho tiempo.  Halando a nivel de nuestras relaciones interpersonales, nuestros procesos de comunicación están más influenciados por el afecto o el repudio que tenemos hacia los demás, que por unas conclusiones lógicas y equilibradas.

Una buena manera de conservar la paz mental es no involucrarse mucho en discusiones y no tratar de imponer ideas a otros.

  1. La memoria selectiva.

El cerebro es muy parecido a una máquina, ella recibe las impresiones del mundo exterior y las procesa.  El cerebro responde a las leyes físicas como cualquier cosa material, por lo tanto también tiene sus limitaciones. Es decir que el desarrollo de ciertos procesos consumen energía, toman su tiempo, y se deben tomar atajos con el fin de evitar caer en ciclos largos de desarrollo de un proceso.

En los últimos años los psicólogos han venido hablando de la memoria selectiva,  en la que el cerebro filtra nuestros recuerdos, con el fin de lidiar de tomar decisiones más rápidas y favorables.  El cerebro es selectivo porque el poner atención a cada detalle es algo que consumiría muchos recursos y muchísimo tiempo, y además los sentidos no alcanzan a recibir tanta información al mismo tiempo. Si usted está en una reunión, es muy difícil que usted conserve todos los detalles de esta, y muy seguramente solo conserve fracciones de la conversación en las que se sienta aludido o agredido.  El psicólogo Daniel Goleman nos habla muy detalladamente acerca de los procesos del cerebro en los que se bloquea aquello que nos hace sentir mal, y se elige mantener los recuerdos agradables.  Esta es la explicación por la que dos personas pueden hablar algo completamente diferente acerca de un mismo tema que hayan estado escuchando.

La memoria graba la interpretación de la realidad no la realidad misma, no es como una vídeo-grabadora que registra todo, si no que actúa en función de las circunstancias.  En los últimos años, se ha desestimado mucho en los procesos judiciales la colaboración de testigos presenciales, ya que según investigaciones, se ha comprobado cómo se pueden implantar falsos recuerdos en dichos testigos.

  1. Acomodar según intereses personales.

Dejando de lado la memoria selectiva, hay otro proceso en el cerebro que tiene como objetivo hacernos quedar bien, como un mecanismo de supervivencia, de destacar y mantener una imagen dentro de un grupo social.  Esto es un proceso más consciente, y no se basa tanto en los recuerdos; si no que a la hora de comunicarnos, elegimos hablar lo que nos conviene.

Nadie es tan tonto como para divulgar aquello que lo deja en clara desventaja, esa es la razón porque todo argumento que expongamos siempre se va a acomodar de tal manera que nosotros quedemos bien. Esta es la razón por la que no podemos esperar que la narración de ciertos hechos sean completamente verídicos y ajustados a la realidad tal y como sucedieron.  Si usted fuera a averiguar en su empresa por qué un proceso ha salido mal; entonces muy seguramente escucharíamos una explicación en donde la persona implicada hizo hasta lo imposible por hacer las cosas bien, pero las otras personas y las circunstancias se confabularon en su contra.  Rara vez escucharemos a alguien asumiendo responsabilidades de las cosas tal y como ocurrieron.

La explicación a esto la encontramos en los grupos sociales animales, en donde todos luchan por llegar a ser un macho alfa y las hembras por procrear con dichos machos alfas. Todo símbolo de debilidades siempre genera ciertas desventajas a nivel social, el cual puede ser aprovechado por otros rivales.  Esas memorias y esas luchas de poder aún se conservan en nuestro subconsciente, entonces eso influye mucho a la hora de proyectarnos a los demás.

  1. El cerebro reescribe los recuerdo con algo nuevo.

Según investigaciones se ha comprobado que el cerebro en la medida que recuerda algo, va reescribiendo las memorias, es decir que sesga cierta información y le agrega algo más, de tal manera que el recuerdo original puede ser con el tiempo muy desajustado a lo que realmente sucedió.  Las personas pueden estar completamente seguras de lo que están diciendo sin ser conscientes de que ello puede ser falso.  Es por eso que se dice que un mentiroso con el tiempo se empieza a creer sus propias mentiras. El autoengaño es más común de lo que creemos. Solemos estar muy equivocados de muchos temas y a la vez estar tan seguros de que es así.

En la vida diaria hemos visto como un circuito de comunicación empieza con ciertos comentarios y después se vuelva algo completamente desajustado. A esto sumémosle que somos personas más emocionales que lógicas.  A lo largo de la historia ha sucedido muchas veces, que aparte de la historia ser manipulada por ciertos círculos de poder según sus conveniencias, esta también ha sido tergiversada por el paso de los años y de las culturas.

  1. Los límites del cerebro: Memes y sesgos cognitivos.

Un meme es una transmisión cultural de una idea, que supone un proceso de asimilación mental de acuerdo al medio con el que se interactúa.  El concepto fue introducido por Richard Dawkins en su libro: “El gen egoísta”.  En definitiva es la transmisión y asimilación de una idea, rasgo cultural, hábito, simplemente porque ya está en el medio.  Las personas son católicas o budistas simplemente por el medio en que nacieron.  En nuestras relaciones interpersonales se escuchan fácilmente comentarios de los demás y fácilmente los asumimos, de tal manera que nuestro comportamiento con los demás es por un mecanismo reflejo y no por algo que hayamos concluido por una relación directa con la persona. Cuantas veces no hemos asumido la percepción y la acción incorrecta contra alguien sin darles la oportunidad de conocerlos. Aunque a ligera juzguemos este comportamiento del cerebro como algo que causa muchos problemas, por economía y rapidez en los procesos, es más fácil para el cerebro asumir algo como cierto de acuerdo al ambiente, que ponerse a revisar cada argumento respecto a cada cosa que existe. En base a esto podríamos decir que la naturaleza es sabia pero no perfecta.

Por otra parte; un sesgo cognitivo, son limites subconscientes a la hora de interpretar la realidad. Existen muchos y para colocar solo algunos ejemplos hablemos del sesgo de anclaje, que es una tendencia de nuestra mente a fijarse en una sola parte de la información a la hora de tomar una decisión. Es decir que a la hora de nuestro cerebro analizar una información no lo hace a nivel global teniendo en cuenta todos los elementos, sino que tiene la tendencia a anclarse en un solo punto que sea de interés personal. Otro de esos sesgos es el de confirmación, el cual es la tendencia a confirmar una idea solo por el hecho de que se acomoda a sus propias ideas, sin importar ni confirmar su veracidad. Es decir que una cosa es cierta simplemente por el hecho de que se acomoda a nuestros preconceptos, y es falsa en tanto vaya en contra de nuestras creencias e intereses personales. Otro sesgo es el de poder corrupto, es el abuso del poder por parte de un individuo cuando estos se sienten con mucha libertad y sin restricciones.  De esto ya hemos hablado en nuestro artículo “porque la gente con poder suele mentir”.  En todo caso son muchos los sesgos, y la psicología cognitiva ha avanzado mucho en el tema.

CONCLUSIÓN

Ahora ya entenderá usted porque es tan difícil entendernos con los demás, sobre todo cuando hay una convivencia más estrecha, en donde cada cual lucha por satisfacer sus intereses personales, sumado a todos nuestros límites naturales en la comunicación, puede generar toda clase de conflictos.   La comunicación con nuestro entorno es sumamente importante y es por ello que debemos saber expresarnos de acuerdo a quien nos escucha, y por otro lado no debemos dejar que los problemas de comunicación que surgen en un entorno afecten demasiado nuestro ánimo.

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